"Jesús Te Sorprende A Pesar De La Tradición"
Estudio El significado bíblico de tradición es aquella enseñanza transmitida de una persona a otra. Ya sea de forma oral o escrita. Una tradición es algo que hemos aprendido de nuestros antepasados y la practicamos como lo hacían ellos. El Antiguo Testamento nos muestra cómo Dios le dio la ley a su pueblo para que le obedecieran y así agradarle a Él. Más en su perfecto plan, Dios sabía que la ley solo le iba a demostrar al hombre que no podía justificarse ante Él, pues si cumplías toda la ley y fallabas en un punto, te hacías culpable de toda la ley. Santiago 2:10 dice: “Pues el que obedece todas las leyes de Dios menos una es tan culpable como el que las desobedece todas”. La ley sin embargo fue el instrumento que utilizó Dios para llevarnos a Cristo, para que comprendiéramos que necesitamos un Salvador, alguien que pague el precio de nuestro pecado, la muerte. Y ese Salvador que todos necesitamos es Jesucristo. Gálatas 3:24 nos lo sustenta: “Dicho de otra manera, la ley fue nuestra tutora hasta que vino Cristo; nos protegió hasta que se nos declarara justos ante Dios por medio de la fe”. Más, aun así, muchos hoy día prefieren continuar tratando de justificarse ellos mismos ante Dios tratando de cumplir en sus fuerzas lo que solo podemos cumplir en las fuerzas que nos da el Señor.
Cuando el hombre se justifica por sus acciones siguiendo tradiciones religiosas:
- Luego de convertirte a Cristo, ¿vives de la misma manera que lo hacías antes, o has cambiado tus costumbres?
- ¿Reconoces la diferencia entre una tradición y una relación?
- ¿Consideras que sigues a Jesucristo siguiendo las tradiciones religiosas o más bien puedes decir que vives una relación íntima con Dios?
Aplicación
Jesús vino a nosotros para mostrarnos cuál es el camino a Dios. En el Evangelio según Juan 14:6 Jesús les dijo a Sus discípulos: “Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie puede ir al Padre si no es por medio de mí”. En su tiempo en la tierra, Jesús tuvo enfrentamientos con los religiosos de su época, pues ellos no lo reconocieron como el Salvador por estar aferrados a la ley misma que ni ellos mismos podían cumplir, pero exigían que otros cumplieran. Él vino a cumplir la ley y a resumirla en dos mandamientos. Mateo 22:36-40 nos dice: —Maestro, ¿cuál es el mandamiento más importante en la ley de Moisés? Jesús contestó: “Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente”. Este es el primer mandamiento y el más importante. Hay un segundo mandamiento que es igualmente importante: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”. Toda la ley y las exigencias de los profetas se basan en estos dos mandamientos—. La Gracia de Dios nos permite vivir una relación con Dios mediante Cristo y la ayuda del Espíritu Santo, una relación de amor y obediencia total a Dios mediante Su amor manifestado en nosotros. El amar como Dios nos ama no está en nuestra naturaleza pecaminosa, por tal razón las tradiciones y las exigencias humanas para cumplir la ley son inútiles, ya que necesitamos la Gracia de Dios en nosotros para amar y así cumplir los mandamientos de Dios.
Cuando vivimos en la gracia de Dios y no en tradiciones religiosas:
- Vivimos una relación genuina con Dios y no una religiosidad.
- Vivimos en el amor de Dios y podemos amar como Él nos ama.
- Tenemos la victoria, el gozo y la paz que solo por medio de la fe en Cristo podemos tener.
Conclusion
Jesús nos enseñó a vivir esperando ver lo sobrenatural en nuestro diario vivir, sorprendiéndonos al ver cómo Dios se manifiesta por medio de nosotros con milagros, sanidades, liberaciones, etc. Los equipó con las herramientas espirituales necesarias para que podamos ser sus instrumentos en la tierra. Como dice en Colosenses 2:8 “No permitan que nadie los atrape con filosofías huecas y disparates elocuentes, que nacen del pensamiento humano y de los poderes espirituales de este mundo y no de Cristo”.
Escrito por: Linda Vélez
|