La Familia Imperfecta
Que Busca La Perfección
En La Gracia De Dios
Estudio
La familia es la institución más importante de la pirámide de la sociedad, esta es la que está a cargo de formar el carácter del individuo para llegar a ser una parte importante y productiva de dicho grupo. Desde el inicio de la creación, Dios establece la familia con el propósito de mostrarlo a Él por medio de cada uno de los miembros de este grupo tan importante en la vida, esto muy a pesar de que Él conocía ya de antemano lo que iba a ocurrir y el plan de redención que tendría que poner en marcha con Su Propio Hijo. No porque Él como Creador fallara, sino más bien porque Él entendía y conocía que al ser creación y no Dios mismo tendríamos defectos o por así decirlo, fallas en entender quiénes éramos y quién era Él como Dios y Creador.
En medio de todo lo ocurrido, el ser humano ha ido perdiendo su identidad y el propósito con el que fue creado. Dice en Génesis 1:31 “Entonces Dios miró todo lo que había hecho, ¡y vio que era muy bueno! Y pasó la tarde y llegó la mañana, así se cumplió el sexto día”. Vemos en este verso cómo Dios mismo dice que es bueno lo que Él hizo, no excelente, porque Él sabía lo que ocurriría más adelante que el ser humano se dejaría influenciar por el padre de toda mentira. Imagino que estarás pensando y esto qué tiene que ver con la familia, bueno cuando comenzamos a perder de perspectiva nuestro rol como creación y como reflejo de Dios, esto no significa que no hay solución muy por el contrario, hay formas de como individuo trabajar en dirección a lo que Dios ha establecido para cada uno de nosotros.
El Libro de Efesios establece que muy a pesar de Dios saber cómo nos alejaremos de nuestro propósito que Él estableció para cada uno de nosotros, aun así Él decidió amarnos y salvarnos. Efesios 1: 4-8: “Incluso antes de haber hecho el mundo, Dios nos amó y nos eligió en Cristo para que seamos santos e intachables a sus ojos. Dios decidió de antemano adoptarnos como miembros de su familia al acercarnos a sí mismo por medio de Jesucristo. Eso es precisamente lo que él quería hacer, y le dio gran gusto hacerlo. De manera que alabamos a Dios por la abundante gracia que derramó sobre nosotros, los que pertenecemos a su Hijo amado.Dios es tan rico en gracia y bondad que compró nuestra libertad con la sangre de su Hijo y perdonó nuestros pecados. Él desbordó su bondad sobre nosotros junto con toda la sabiduría y el entendimiento”.
Ver tanto amor, gracia y misericordia derramada por nosotros es solo Dios el que puede hacerlo. Aun en estos versos podemos ver que para Dios es, era y será importante añadirnos a su familia, que seamos miembros de su familia. Este siguiente verso nos debe llenar de tal gozo el que seamos añadidos a la familia de Dios, uff! Efesios 1:5: Dios decidió de antemano adoptarnos como miembros de su familia al acercarnos a sí mismo por medio de Jesucristo. Eso es precisamente lo que él quería hacer, y le dio gran gusto hacerlo”.
Aplicación
Conociendo que Dios sabe lo imperfectos que somos, es de suma importancia que nosotros lo entendamos para así comenzar a depender de Él y poder lograr retomar nuestro camino o mejor dicho el propósito establecido por Dios. En el Libro de Romanos lo expone de una forma magistral. Romanos 10: 9-10: “Si declaras abiertamente que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios lo levantó de los muertos, serás salvo. Pues es por creer en tu corazón que eres hecho justo a los ojos de Dios y es por declarar abiertamente tu fe que eres salvo”. Esto nos enseña que la confesión es de gran importancia, tenemos que reconocer nuestros pecados y trabajar de la mano de Dios para poder corregir lo que no está correcto en nuestras vidas. Y por qué confesar, porque así entenderemos que necesitamos de Él para corregirlo y luego de corregir tenemos que continuar dependiendo de Él para vivir en medio de esa corrección.
Nos dice Lucas 3: 8-9 “Demuestren con su forma de vivir que se han arrepentido de sus pecados y han vuelto a Dios. No se digan simplemente el uno al otro: “Estamos a salvo porque somos descendientes de Abraham”. Eso no significa nada, porque les digo que Dios puede crear hijos de Abraham de estas mismas piedras. Ahora mismo el hacha del juicio de Dios está lista para cortar las raíces de los árboles. Así es, todo árbol que no produzca buenos frutos será cortado y arrojado al fuego”. Al comenzar a vivir de esta forma regresaremos al propósito original, que es ser reflejo de Dios. De esa forma al corregir nuestras vidas podemos comenzar a encaminar nuestras familias a vivir bajo la corrección de la familia celestial, quien nos modela y nos dirige a llevar una vida familiar correcta y saludable.
Algo que Cristo dijo muy importante que deberíamos entender y que establece Su carácter y la enseñanza que nos quería dar está en Mateo 20: 26-28: “Pero entre ustedes será diferente. El que quiera ser líder entre ustedes deberá ser sirviente, y el que quiera ser el primero entre ustedes deberá convertirse en esclavo. Pues ni aun el Hijo del Hombre vino para que le sirvan, sino para servir a otros y para dar su vida en rescate por muchos”. Sí, así es! Tenemos que anteponer al otro para así cumplir lo que Dios nos pide, no solo anteponer, sino trabajar con el entendimiento de que no debemos ser egoístas. Cristo no lo fue. Él sabía cuál era su propósito y aún en el momento más duro, sabiendo que estaba cerca de los azotes y de su muerte supo pedirle al Padre que no se hiciera Su voluntad si no la del Padre. Esto no quiere decir que no tenía miedo, tampoco quiere decir que no pensó en Él en lo que estaba a punto de afrontar, pero aun así se armó de valor y asumió su responsabilidad. Cumplió su propósito que al final dio frutos para la humanidad y para Él. Ahora la humanidad tiene opción a salvación por medio del arrepentimiento, y a Él le fue dado un Nombre sobre todo Nombre. Tiene derecho a abrir los sellos y tantas cosas más. ¿Qué te quiero decir con esto? Busquemos ser mansos y humildes como Él lo fue, desechemos el orgullo, la soberbia y todas estas cosas para poder trabajar mejor en nuestros núcleos familiares.
¿Qué podemos hacer para mostrarnos a Dios?
- Amarnos los unos a los otros.
- Dar la mano al que está caído.
- Ayudar a los que están en necesidad.
- Servir en nuestras iglesias.
- Buscar la voluntad de Dios.
- Servir en nuestros trabajos y ser ejemplos de Cristo.
- Ver a nuestras familias como Cristo nos vio a nosotros.
Estamos hablando de familias imperfectas que buscan la perfección en la gracia de Dios, y esto solo lo pueden hacer aquellos que ya como individuos han reconocido sus imperfecciones y sus fallas. Que han comenzado a trabajarlas desde la óptica de Jesucristo, pero también entendiendo que solo de la mano de Él y en Él podemos lograrlo. Tal como Pablo le decía a los Corintios en 2 Corintios 12: 9-10: “Cada vez él me dijo: «Mi gracia es todo lo que necesitas; mi poder actúa mejor en la debilidad». Así que ahora me alegra jactarme de mis debilidades, para que el poder de Cristo pueda actuar a través de mí. Es por esto que me deleito en mis debilidades, y en los insultos, en privaciones, persecuciones y dificultades que sufro por Cristo. Pues, cuando soy débil, entonces soy fuerte”. Qué enseñanza más hermosa de uno de los apóstoles más renombrados de la historia; él estaba centrado de que en todo lo que hacía siempre, siempre darle la gloria a quien la merecía. De igual forma nuestras familias deben hacer para poder reflejar a Cristo en todo lo que hacemos, primeramente el uno por el otro y luego por los demás.
Como cristianos nunca dejamos de aprender, pero es muy satisfactorio pensar que podemos ser luz en medio de tinieblas, más aún cuando vemos que todo lo que ha sido profetizado se está cumpliendo.
¿Qué necesitas para ser un buen reflejo de Dios?
- Leer la Palabra de Dios.
- Orar en todo momento.
- Pedir a Dios que te permita reconocer cuándo hay que hacer cambios en tu vida.
- Que te dirija en la dirección de restaurar y cambiar tu vida en dirección a lo que Jesucristo modeló aquí en la tierra.
- Acercarnos más al Espíritu Santo para que podamos entender y llevar a cabo todo lo que se nos pide.
- Tener la disposición para reconocer y cambiar aquello que nos aleja de nuestro propósito.
Conclusión
Las familias están compuestas por seres humanos imperfectos, que crean grupos importantes que establecen la base de toda sociedad. La familia, siendo el grupo más importante de la sociedad debe reconocer que necesitamos hacer a Cristo el centro de todo. Primero del ser humano como individuo, y luego como familia entender cuán imperfecto somos pero que tenemos la promesa de que Él estaría con nosotros y nos ayudaría a superar y trabajar para ser excelentes embajadores personales y como familia. Santiago en su libro muestra una descripción perfecta de lo que nos limita de crecer, y una de ellas es la amistad con el mundo, cosa que nos lleva a parecernos más al mundo pero la amistad con Cristo, nos hará más parecidos al Padre. Así que si queremos ser una familia imperfecta que busca la perfección en la gracia de Dios tenemos que aprender a depender del Padre sin límites y sin restricciones pero además, aprender a reconocer nuestra verdadera identidad y propósito para ser ejemplo para otros.
Escrito por: Tatiana Muñiz
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