"Una Nueva Oportunidad
De Luchar " 

Estudio
Todos hemos cometido y continuamos cometiendo  errores a lo largo de nuestra vida,no siempre tomamos las mejores decisiones ni actuamos de la mejor manera frente a la circunstancias y esto nos lleva a atravesar consecuencias, como resultado de aquellos malos pasos. Pero también nos vemos enfrentados a un gran número de adversidades ajenas a nuestros actos,  situaciones que en el diario vivir se originan, convirtiéndose en pruebas que vienen también a desestabilizarnos trayendo confusión y desesperación. 

Cualquiera que sea el caso es claro que las fuerzas humanas no son suficientes y siempre es necesaria la intervención de Nuestro Creador, del Dios  Todopoderoso, del Dios de lo imposible, para continuar y seguir en la batalla. Deuteronomio 31:6 dice ¡Así que sé fuerte y valiente! No tengas miedo ni sientas pánico frente a ellos, porque el Señor tu Dios, él mismo irá delante de ti. No te fallará ni te abandonará». El Señor nos anima continuamente a través de Su Palabra a no rendirnos y continuar luchando a pesar de que nuestras fuerzas se han agotado y nos pide que seamos fuertes y valientes porque Él ha prometido acompañarnos durante cada proceso sin abandonarnos , ni fallarnos. Dios ha decidido ir delante de nosotros para darnos  guía, colmarnos de sabiduría y nuevas fuerzas para continuar en medio del dolor por el que estemos atravesando. 

¿Qué sucede si decido vivir y luchar bajo mis propias fuerzas y no depender del Poder y la Voluntad de Dios?  

• Viviremos en constante frustración y desesperación por la toma de decisiones equivocadas.
• No podremos conocer la Obra de Dios en nuestra vida y viviremos alejados de Su Propósito.
• Será una lucha constante y agotadora, de continuos tropiezos, sin ver los resultados esperados.
• Pensaremos equivocadamente que las circunstancias y dificultades determinan nuestro destino pues será imposible ver el obrar de Dios y la Victoria que viene sólo de Él .

Aplicación
Es imposible vivir separados de Dios y de Su perfecta voluntad, por más que nos esforcemos en separarnos de Él y vivir bajo nuestro propio parecer y fuerzas y elegir ser guiados e influenciados por los ideales equivocados del mundo, tarde o temprano entendemos que esta mala decisión trae desgracia, desesperación, confusión y calamidad a nuestra vida. Solo en el Señor, Quien tiene el Poder y la Soberanía de todo lo creado, incluyendo de nuestra vida en TODAS sus áreas, encontramos las fuerzas necesarias para continuar adelante.

En la Biblia encontramos muchos relatos de hombres y mujeres cuyas vidas fueron transformadas en su totalidad después de recibir nuevas fuerzas de parte de Dios. ¿Necesitas ánimo hoy para enfrentar el día? Deja que la Palabra de Dios traiga a tu corazón estímulo y que renueve tu ser.  En Jeremías 29:11 “Pues yo sé los planes que tengo para ustedes—dice el Señor—. Son planes para lo bueno y no para lo malo, para darles un futuro y una esperanza”.  Tenemos que reconocer que con nuestra mente finita es imposible entender la inmensidad del amor de Dios Sus bondades y que la  imaginación humana se queda corta ante la plenitud de todo lo que tiene preparado para nosotros por la eternidad. Y este pensar debe animarnos y fortalecernos cada día a pensar que en medio de las adversidades; Dios está de nuestro lado animándonos, transformándonos y preparándonos para seguir luchando, pero que el mantenernos firmes, traerá también una Bendición eterna.

Recordemos lo que dice el salmista en  Salmos 55:22 “Entrégale tus cargas al Señor  y él cuidará de ti; no permitirá que los justos tropiecen y caigan.” Es Cristo nuestro lugar seguro, es a quien debemos acudir en todo momento y en toda situación. Llevemos a Él cada preocupación, duda, confusión o tristeza, Él cuida de nosotros y  se deleita llenando nuestro corazón de una paz incomprensible y colmando nuestra vida con nuevas fuerzas para continuar. 

¿Cómo podemos aprender a vivir en las fuerzas de Dios y no en las nuestras?

• Esforzándonos por conocerle y mantener una intimidad profunda con Él a través de la oración y la lectura de la Palabra.
• Dependiendo de la dirección de Dios para cualquier decisión que tengamos que tomar.
• Trayendo a Él todas nuestras cargas, sufrimientos y permitiéndonos descansar en Su Paz que sobrepasa  todo entendimiento.
• Esforzarnos y tener siempre presente que estamos llamados a vivir en SU voluntad y en SUS fuerzas y no en las nuestras.
• Muriendo continuamente a nosotros mismos y que sea Él revelándose cada día más en nuestras vidas.