Probados Por Dios
Estudio Al convertirnos a Cristo aceptándolo como nuestro Señor y Salvador, comenzamos una vida nueva. Comenzamos el Camino de la Fe. ¿Cómo entonces podemos saber si vamos caminando bien o no? Dios usa las pruebas para evaluar nuestro progreso en el camino de la fe. En 1 Pedro 1:7 se nos dice que: “Estas pruebas demostrarán que su fe es auténtica. Está siendo probada de la misma manera que el fuego prueba y purifica el oro, aunque la fe de ustedes es mucho más preciosa que el mismo oro. Entonces su fe, al permanecer firme en tantas pruebas, les traerá mucha alabanza, gloria y honra en el día que Jesucristo sea revelado a todo el mundo”. El propósito de Dios es que seamos perfeccionados en la fe de manera que demos alabanza, honra y gloria a Dios cuando Jesucristo sea manifestado. Tengamos claro que vivir de manera que agrademos a Dios es un trabajo que en nuestras fuerzas no podemos lograr, por tal razón Jesucristo nos prometió que nos enviaría al Espíritu Santo, para guiarnos a toda verdad, redargüirnos de pecado y llevarnos a tener intimidad con Dios. El Espíritu Santo nos ayuda a pasar las pruebas que se nos presenten en la vida, y veremos que cada vez podremos pasar las pruebas con más gozo sabiendo que agradamos a Dios al fortalecerse nuestra fe.
¿Qué nos pasa cuando no pasamos las pruebas?
- Nuestra nueva vida en Cristo no va a crecer en la manera en que debe hacerlo.
- Al reprobar las pruebas nos desanimaremos y podríamos abandonar la fe, todo por tratar de agradar a Dios en nuestras fuerzas.
- Estaremos impidiéndole al Espíritu Santo que nos ayude y nos guíe en nuestra nueva vida.
Aplicación
Sabiendo que: “Sin fe es imposible agradar a Dios. Todo el que desee acercarse a Dios debe creer que Él existe y que Él recompensa a los que lo buscan con sinceridad” (Hebreos 11:6), debemos permitirle al Espíritu Santo que nos guíe en todas las áreas de nuestra vida, que nos entreguemos totalmente a Él de manera que caminemos seguros y cada día podamos avanzar y pasar cada prueba que tengamos. El así hacerlo traerá paz a nuestro corazón sabiendo que es Dios mismo quien nos guía. Job descubrió que en las manos de Dios estaba seguro. En Job 23:10-11 Job dijo: “Sin embargo, Él sabe a dónde yo voy; y cuando me ponga a prueba, saldré tan puro como el oro. Pues he permanecido en las sendas de Dios; he seguido sus caminos y no me he desviado”. Igualmente nosotros debemos alcanzar el grado de fe de Job, que pudo decirle a Dios luego de todas las pruebas que pasó: “Hasta ahora solo había oído de ti, pero ahora te he visto con mis propios ojos” (Job 42:5).
Cuando somos guiados por Dios:
- Vivimos confiados en Él, sabiendo que Él nos sostiene en medio de las pruebas.
- Recibimos la fortaleza que solo Dios puede darnos en medio de las pruebas.
- Podemos pasar las pruebas con gozo y paz seguros que damos gloria, honra y alabanza a Dios.
Conclusión
En Mateo 11:28-29 Jesús nos dijo: “Vengan a mí todos los que están cansados y llevan cargas pesadas, y yo les daré descanso. Pónganse mi yugo. Déjenme enseñarles, porque yo soy humilde y tierno de corazón, y encontrarán descanso para el alma”. Entregar nuestra vida a Dios nos da la seguridad y la paz necesaria para poder enfrentar cualquier tipo de problemas, considerándolo como un tiempo para alegrarnos mucho porque sabemos que, siempre que se prueba nuestra fe, la constancia en nuestra vida se va desarrollando. ¡En Dios estamos seguros!
Escrito por: Linda Vélez
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