"Pegados a la Vid Verdadera"
Estudio
Estamos en unos tiempos críticos en nuestra sociedad ya que constantemente nos esforzamos tanto en ser aprobados y aceptados por nuestras amistades, nuestras familias, nuestros compañeros de trabajo, hermanos de la Iglesia, Pastores, Líderes, en las redes sociales en fin con todo el que nos rodea. Hacemos lo imposible y lo que pensamos que nos ayudará a que esas personas nos puedan aceptar y no ser rechazados.
Los Cristianos se han acomodado tanto a los deseos de este mundo que hasta muchos ven el cristianismo como parte de la moda. Muchas Iglesias han traído al mundo con sus programas especiales, shows, festivales, seminarios entre otras actividades con tal de que la sociedad no los aborrezca.
Pero esto no es lo que Jesús nos enseña y lo que Su Palabra nos habla. Jesús nos dice que por llamarnos Sus discípulos vamos a ser rechazados por el mundo. Jesús sólo exige obediencia total a Su Palabra. Aunque obedecer Su Palabra nos costará que nos odien, seamos hasta perseguidos o seamos aborrecidos pero al final tendremos una recompensa en el cielo.
En Juan 15 nos habla sobre permanecer pegados a la Vid Verdadera que es Cristo.
Cuando no permanecemos firmes en la verdad:
- Nos acostumbraremos a los deseos mundanos.
- Viviremos para agradar a todo el mundo.
- Nos dejaremos influenciar por la sociedad y sus costumbres.
- El mundo y sus opiniones serán más importantes que lo que Dios dice de nosotros.
AplicaciónJesús sabía que nuestra vida aquí en la tierra no iba hacer fácil. Es por eso que nos dejó al Espíritu Santo. Para Jesús el Espíritu Santo era demasiado importante porque iba a tener unas funciones esenciales en la vida de cada creyente.
En Juan capítulo 16 vemos como el Espíritu Santo nos convence de pecado y a la vez nos lleva a renunciar a nuestros propios deseos. El mundo es difícil y está lleno de tentaciones y problemas, pero a través del Espíritu Santo obtenemos la fortaleza para vencer. El Espíritu Santo es mucho más que una emoción, escalofríos, pelos parados, entre otras cosas que podamos sentir. Él es Quien nos transforma, el que restaura nuestra mente y nuestro corazón.
En Juan 17 nos habla sobre la oración de Jesús, no sólo por Sus discípulos sino por todo el que le iba a conocer o lo conoce.
Cuando permanecemos firmes en la Verdad:
- Guardaremos las Palabras de Jesús que hemos aprendido en nuestro corazón.
- Estaremos conscientes del amor y sacrificio de Dios por nosotros.
- No volveremos atrás de donde Dios nos sacó.
- Compartiremos a Cristo con nuestra familia y con otros para que lo conozcan.
Conclusión
En los capítulos de Juan 18-21 nos explica la traición de Jesús, Su arresto, Su muerte, Su crucifixión y Su resurrección.
En estos capítulos vemos como Jesús siendo inocente, permaneció firme en la Verdad, cumpliendo el propósito que tenía en la tierra. Jesús se sometió en obediencia al Padre, aunque lo traicionaron, vivió momentos de incertidumbre, soledad y abandono siguió caminando hacia Su destino y llamado.
De todo esto podemos aprender, que como creyentes en muchas ocasiones nos sentiremos solos si de verdad somos discípulos y estamos dispuestos a seguir y obedecer a Dios.
En este Nuevo Año 2021 que nuestro anhelo sea buscar tener un corazón correcto delante de nuestro Padre, ese corazón perdonador, un corazón contrito y humillado, un corazón que ame sin condiciones a todos, un corazón limpio, un corazón sincero, un corazón que haga la Voluntad de Él, un corazón agradecido, un corazón que permanezca firme aun en los momentos duros, un corazón que le adore aun cuando no tenga el ánimo y un corazón esperanzado para aceptar lo que Dios ha determinado y ha hablado a tu vida. (Salmos 51:10) No valdrá la pena el servir a Dios sea en la posición que tengas como Pastor, Líder, Ministro, Mentor, Maestro, etc. si no tienes un corazón aprobado por Dios. Puedes aparentar ser el más espiritual y jactarte de tu posición en la Iglesia o en cualquier otro lugar, pero si no tienes un corazón correcto ante Dios y ante otros estarás engañándote a ti mismo y habrás perdido el tiempo. Busquemos a Dios con intención y seamos discípulos, no meros creyentes. Permanezcamos firmes en la Verdad para estar conectados y llevar frutos que alcancen a uno más. Que este Nuevo Año podamos seguir declarando:
“No hay nada mejor que ser Cristiano”.
Escrito por: Ninette Marrero
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