" El Diablo Viene A Robar La Palabra"
Estudio
El diablo es enemigo de Dios y por ende enemigo de todos los hijos de Dios, por lo tanto su meta principal es lograr que nosotros no creamos en Dios ni en sus promesas. Dios sin embargo envió a Su Hijo al mundo para que el mundo fuera salvo por Él. Salvos de una eternidad separados de Dios, como es el destino de Satanás y de todos los que lo sigan. Así que al convertirnos a Cristo, al aceptar el sacrificio de Él en la Cruz para el perdón de nuestros pecados, entramos en guerra contra el diablo y el mundo de las tinieblas. Hemos pasado de muerte a vida en Jesucristo, ya no tenemos que obedecer al diablo ni actuar como si no hubiéramos conocido a Dios por medio de Cristo. En 1 Juan 3:7-9 se nos dice: “Queridos hijos, no dejen que nadie los engañe acerca de lo siguiente: cuando una persona hace lo correcto, demuestra que es justa, así como Cristo es justo. Sin embargo, cuando alguien sigue pecando, demuestra que pertenece al diablo, el cual peca desde el principio; pero el Hijo de Dios vino para destruir las obras del diablo. Los que han nacido en la familia de Dios no se caracterizan por practicar el pecado, porque la vida de Dios está en ellos. Así que no pueden seguir pecando, porque son hijos de Dios”. “La fe viene por oír, es decir, por oír la Buena Noticia acerca de Cristo” (Romanos 10:17). De ahí que Satanás busca por todos los medios robarnos la Palabra, evitar que ésta penetre en nuestros corazones y que no vivamos agradando a Dios y creyendo en las promesas que Dios nos ha dado.
¿Qué nos sucede cuando siendo “hijos de Dios” vivimos practicando el pecado?.
- Somos engañados por el diablo.
- Estamos viviendo contrario a lo que nos dice la Escritura y por lo tanto en desobediencia a Dios.
- No le estamos permitiendo al Espíritu Santo hacer Su obra en nosotros.
- Quizás nunca hemos nacido de nuevo, solo vivimos una religiosidad y no la nueva vida plena y abundante que Jesús vino a traernos.
Aplicación
La Biblia nos muestra las técnicas que utiliza Satanás para robarnos la Palabra de Dios. En la parábola del sembrador (Marcos 4:15-17) se nos muestran diferentes semillas y lo que Satanás hace para que no crezcan. Las semillas que cayeron en el camino representan a los que oyen el mensaje, pero enseguida viene Satanás y lo quita; las semillas sobre la tierra rocosa representan a los que oyen el mensaje y de inmediato lo reciben con alegría pero como no tienen raíces profundas, no duran mucho. En cuanto tienen problemas o son perseguidos por creer la Palabra de Dios, caen. O sea, Satanás buscará la forma y manera de distraernos de manera que la Palabra no crezca en nuestros corazones y así robarnos todas las bendiciones que Dios tiene para nosotros. Otra manera de atacarnos es sembrando en nuestras mentes el que no valemos, no somos importantes y no merecemos el amor de Dios, es así como puede llegar a hacernos creer que la salvación no es para nosotros y nos lleva a vivir vidas llenas de pecado, angustia, ansiedad, sin fe y por ende, sin esperanza de un futuro mejor. Tenemos que estar alertas a los ataques del enemigo y como único podremos salir victoriosos es por medio del Espíritu Santo que es quien nos guía a toda verdad. Dios dijo: “Mi pueblo está siendo destruido porque no me conocen” (Oseas 4:6a). Dios proveyó Su Palabra para que pudiéramos conocerle y tener una íntima relación con Él, por eso Satanás quiere robarnos la Palabra.
Cuando sabemos la importancia de la Palabra de Dios y la vivimos:
Somos guiados por el Espíritu Santo que es quien nos va transformando a la imagen de Cristo.
- Gozamos de una vida abundante y victoriosa pues conocemos y disfrutamos de todas las promesas de Dios para nosotros.
- Nos sometemos a Dios, resistimos al diablo y huirá de nosotros.
- Gozamos de una vida abundante y victoriosa pues conocemos y disfrutamos de todas las promesas de Dios para nosotros. No ignoramos las maquinaciones del enemigo, así que Satanás no puede aprovecharse de nosotros.
Conclusión
Satanás quiere llevarnos a la muerte eterna, por eso su afán de que no conozcamos a Dios a través de las Escrituras. Él quiere robarnos, matarnos y destruirnos, más Dios tiene para nosotros vida plena y abundante, vida eterna. En Juan 5:39 Dios nos manda a escudriñar a fondo las Escrituras, pues en ellas hallaremos la vida eterna ya que nos llevan a conocer a Dios y Su amor eterno manifestado en el sacrificio de Cristo para el perdón de nuestros pecados y de esa manera restaurar la comunión que en un principio el hombre tenía con Dios. Si así lo hacemos “El Dios de paz pronto aplastará a Satanás bajo nuestros pies y viviremos en la gracia de nuestro Señor Jesús” (Romanos 16:20).
Escrito por: Linda Vélez
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