"Como hablarles a las personas de Cristo"
Estudio No existe una regla específica para comenzar hablar de Cristo a una persona. Sin embargo, es reconfortante saber que Dios escucha nuestras oraciones, y es fiel para darnos cualquier cosa que esté de acuerdo con Su Voluntad. Ya que Dios desea que todo el mundo conozca la Verdad.
Usted puede confiadamente pedirle que le proporcione oportunidades para compartir su fe. Orar para que Dios guíe sus encuentros para testimoniar su fe, le permite confiar en Su poder sobrenatural, en lugar de en su propia habilidad. Él eliminará su miedo a testimoniar.
Qué cosas puedes hacer diferentes para provocar hablar de Dios . . .
- Poner en oración que Dios te señale el momento oportuno para hablarle a una persona de Cristo.
- Reconocer que tu testimonio es el mejor recurso que tienes para llegar a la vida de un inconverso.
- Saber que no hay un día en especial, usted hace especial el día.
Aplicación A menudo, compartir su testimonio personal es una respuesta efectiva. Su testimonio personal es la mejor manera de ilustrar que una relación con Dios es una experiencia transformadora. Nuestra meta debe ser mostrar un gozo genuino mientras informamos lo que hemos vivido, en lugar de convencer.
Alguien dijo en una ocasión que testificar es: “Un méndigo diciéndole a otro méndigo dónde conseguir pan”. Es el deseo de mostrar a otros el gozo de haber encontrado el Pan de Vida, Jesucristo, quien ha saciado la necesidad más profunda de nuestra alma. Y de esa manera, deseamos que otros experimenten el mismo gozo y la misma bendición.
En ocasiones incluso es más difícil hablar a alguna persona acerca de Cristo, porque ven una vara moral tan alta, que sienten que son incapaces de vivirla o que ese estilo de vida es muy duro de alcanzar. Pero como la existencia de Dios es ante todo amor y no ley, debemos siempre mostrar al Dios de Amor.
Hechos 1.8 Pero recibirán poder cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes; y serán mis testigos, y le hablarán a la gente acerca de mí en todas partes: en Jerusalén, por toda Judea, en Samaria y hasta los lugares más lejanos de la tierra.
Como cumplir con esta encomienda . . .
- Siempre recuerde cómo usted llegó a conocer de Cristo, cómo era su vida antes y cómo es ahora.
- Para Dios no hay pecado tan grande que no pueda perdonar, su deber es compartirle el amor de Cristo.
- Recordemos siempre que somos imitadores de Cristo.
Conclusión Es el poder y la gracia de Dios la que salva a la gente, no nuestros esfuerzos. Lo mejor y más importante que debemos hacer es; ¡orar por ellos, testificarles, y vivir la vida cristiana ante ellos! Comparte como tu creencia en Cristo influye en tus opiniones y acciones. Aprovecha la oportunidad para demostrar que Cristo es siempre la respuesta.
Si el Evangelio es parte de tu vida, demuéstralo! Porque eso llevará a las personas a preguntarte y tú tendrás la mejor oportunidad de hablar de Cristo. 2 Corintios 4.4
Escrito por: Marisol Reyes
|