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Tiempo Familiar - Semana 15
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" La Libertad Espiritual "

 

Estudio
Cuando venimos a los pies de Cristo arrepentidos de nuestros pecados, y lo recibimos como nuestro Señor y Salvador, nuestra vida es transformada. Pasamos de muerte a vida, pero solo podremos ser transformados si le permitimos al Espíritu Santo transformar nuestras actitudes, conductas, hábitos y pensamientos, de manera que ya no vivamos conforme al mundo, sino, conforme a la voluntad de Dios. Él nos rescató del reino de la oscuridad y nos trasladó al Reino de Su Hijo amado, quien compró nuestra libertad y perdonó nuestros pecados (Colosenses 1:13-14). Mas, si no establecemos una relación íntima con Dios no viviremos en esa libertad que Cristo compró para nosotros.

Si desconocemos la libertad que tenemos en Cristo:

  • Viviremos cometiendo muchos errores al desconocer lo que le agrada y no le agrada a Dios.
  • Nuestra lucha diaria contra las fuerzas del mal será dura y nos agotará, no podremos vencer.
  • No seremos libres hasta que no reconozcamos la autoridad de Cristo, que es quien nos da la libertad espiritual.
Aplicación
La Palabra nos enseña que aunque se nos permita hacer cualquier cosa, no todo conviene ni nos trae beneficios. No debemos permitir que el pecado sea el que controle nuestra manera de pensar y de vivir. Vivamos entregados completamente a Dios y así poder ser instrumentos para Su gloria. Dejémonos guiar por el Espíritu Santo y sometámonos a Dios para poder resistir al diablo. Nuestro deber no es contender con Satanás sino resistirlo en nombre de Jesús. No podremos renunciar al poder del pecado en nuestra vida en nuestras fuerzas, sino que es el poder del Espíritu Santo en nosotros el que hace que día a día podamos vivir en la libertad que Cristo nos ha dado. Confiando en Él podemos caminar y cumplir Su voluntad para con nosotros.

Cristo nos da la libertad espiritual para:

  • Que podamos caminar en esa libertad diferenciando el bien y el mal.
  • Que cumplamos Su voluntad para con nosotros.
  • Poder mostrar el amor de Dios a otros y que ellos también puedan ser libres en Su Nombre.
  • Que podamos dejar un legado de amor y libertad en Cristo a los nuestros.

Conclusión
Dado que el Señor es el Espíritu, y donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad (2 Corintios 3:17) podemos vivir en paz y caminar seguros de que Dios está con nosotros y Su Espíritu nos guía en nuestro caminar. Podemos caminar en libertad pues vivimos una vida que agrada a Dios, buscando conocerle cada día más por medio de la oración y estudio de Su Palabra, obedeciéndole y compartiendo el mensaje del Evangelio. Caminando de esa manera podremos rechazar el pecado que nos asecha y lo haremos por amor, porque Él nos amó primero. ¿Por qué conformarnos con caer una y otra vez en los mismos pecados, si tenemos a Cristo que murió y resucitó para darnos libertad?

Nuestra lucha no es carnal sino espiritual, confiemos en Dios y toda situación llevémosla a Él en oración seguros de que Cristo ya venció.

Escrito por: Elizabeth Díaz

Lectura Bíblica
Juan 8:32 NTV

“y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres”.

Orar por

  • Que podamos ser honestos con el Espíritu Santo y le permitamos trabajar y cambiar todo lo que haya en nosotros que no agrade a Dios.
  • Que Dios nos dé el deseo y la voluntad para buscarle, conocerle y servirle.
  • Aprendamos a vivir en la libertad que Cristo nos ha dado, poniendo nuestra mirada en Él y no en el mundo.
Para discutir
  • ¿Considera que su vida antes de conocer a Cristo y luego de conocerlo es igual?
  • ¿Piensa que Cristo le ha libertado? Explique.
  • ¿Cree que está dando testimonio de Cristo a su familia?
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