"La semana pasada conté parte de un testimonio, el cual he contado muchas veces, de cómo Dios sanó a mi hijo José y formó un riñón donde no había uno. Con esto quiero decir, antes de comenzar, que yo creo que Dios hace milagros, que yo creo que Dios sana, restaura y liberta. Pero tengo muy claro de que Dios no está obligado a hacer nada más por nosotros, porque lo mejor ya lo hizo cuando entregó a Cristo a morir en la cruz del Calvario. Pero sí creo que hay un propósito por lo cual Dios continúa haciendo sanidades y milagros en este tiempo. Y el propósito que tenia en aquel tiempo, es el mismo por el que Él continúa haciendo sanidades y milagros hoy. Por eso es que hoy hablaremos de que Jesús es nuestro sanador."

  • Richard Martínez, Pastor Principal